Cada uno de los pelitos de los bordes de nuestros párpados son importante; con lo que es imprescindible adquirir un buen hábito de cuidado de los mismos. Son una barrera que protege a nuestros ojos de polvo y cuerpos extraños, además de ayudar a filtrar la luz solar (sin mencionar el efecto estético que produce a nuestros ojos y rostro ¡)
Cada noche debemos limpiar bien las pestañas y retirar de ellas cualquier producto o suciedad que puedan tener, siempre con la mayor suavidad posible para evitar caídas o roturas de los pelitos.
Cada noche se puede aplicar aceite de almendras o aceite de ricino, para mantenerlas mas fuertes y nutridas (teniendo mucho cuidado de que no caiga producto dentro del ojo). También existen tratamientos específicos para el crecimiento de las pestañas, que venden en farmacias y que te asesorarán genial en función de la necesidad que tengas (estos productos habitualmente los encontrarás en formatos cremas o máscaras de pestañas transparentes). También al igual que el resto de los pelitos de nuestro cuerpo, es importante una alimentación adecuada, pues ayuda a que el pelito esté mas o menos fuerte ( igual que el resto de nuestro cuerpo) La levadura de cerveza es una ayuda ¡
Es importante retirar la máscara siempre antes de acostarnos, utilizando limpiadores específicos y especiales de ojos, realizados a base de aceites para retirar los restos sin tener que frotar mucho y evitar que nuestros pelitos se caigan o rompan.
Al utilizar los rizadores no hay que apretar demasiado ni tirar de las pestañas porque podrían caerse (se suele utilizar una vez al día, generalmente antes de la máscara de pestañas, siempre dependiente del tipo de rizados si es automático o no , pues entonces se aplicaría a posteriori). Es muy importante mantener limpio el rizador, para evitar posible contagios o infecciones en los ojos, con un producto especifico .
Y a lucir pestañas¡¡¡
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